ANGI YODER-MAINA
Angi Yoder-Maina, pionera en la búsqueda de formas creativas de abordar la violencia crónica en África Oriental
Nombres: Angi Yoder-Maina
Organización: Green String Network
Ubicación: Nairobi, Kenia
Enlaces: green-string.org
Twitter: @GSNAfrica / @angiyo58
Facebook: @greenstringnetwork
Instagram:www.instagram.com/greenstringnetwork
Resumen: Angi Yoder-Maina es la directora ejecutiva de una ONG keniana llamada Green String Network, con sede en Nairobi (Kenia), que trabaja a nivel regional para crear y reforzar la capacidad de curación social. Sus programas crean oportunidades para que las personas de Somalia, Kenia, Etiopía y Sudán del Sur, a nivel más local, aprendan sobre los efectos del trauma y comiencen a sanar y se reúnan como comunidad para planificar actividades y estructuras a nivel comunitario para apoyar una mayor curación y reconciliación. Green String Network utiliza la narración de historias, el arte y las prácticas corporales para ayudar a las personas a articular los traumas por los que han pasado y reconocer cómo estas experiencias les han moldeado. A continuación, utilizan estos métodos para desbloquear nuevas formas de pensar, comportarse y sentir, de modo que las personas puedan vivir una vida más plena y pacífica, como individuos y comunidades. Este proceso de curación es el primer y fundamental paso para construir la paz, el bienestar y la prosperidad a largo plazo.
Conflictos: África Oriental tiene una violencia crónica endémica en muchas formas: extremismo violento, violencia de bandas, violencia doméstica, violaciones de los derechos humanos por parte de la policía y violencia electoral, por nombrar algunas manifestaciones específicas. En África Oriental y el Cuerno de África, generaciones y naciones enteras viven en la violencia crónica y han existido en modo de supervivencia durante décadas. La exposición a la violencia tiene efectos duraderos que no se tienen en cuenta en el análisis de los conflictos, los esfuerzos de estabilización, la construcción de la paz y las iniciativas de gobernanza. La exposición extrema a la violencia, los abusos, el abandono y la marginación afectan negativamente a los niveles de resiliencia y a la capacidad de las naciones afectadas para pasar de la guerra a la paz. El equipo de GSN sigue encontrando altos niveles de apatía, aislamiento, agresividad, abuso, enfermedades somáticas crónicas y bajos niveles de flexibilidad, tolerancia y capacidad de confiar y trabajar juntos como resultado del sistema de violencia crónica. Angi ha comprobado que la violencia crónica y los conflictos prolongados siguen afectando a las personas, las comunidades y las instituciones. El tejido social está muy desgarrado y su reparación puede parecer casi imposible. Angi critica a la comunidad internacional por "buscar soluciones rápidas" y la naturaleza política de la reconciliación política en forma de acuerdos de paz a nivel político que no reconocen ni abordan los factores sociales y culturales subyacentes.
Acción y resultados: La Red de Cuerdas Verdes se fundó en septiembre de 2016 y ha crecido rápidamente en solo 5 años. La organización ha trabajado con 14.243 participantes directos, 168 voluntarios de la comunidad y ha formado a 936 líderes en el marco de bienestar y resiliencia. GSN ha desarrollado un modelo denominado "Enfoque de construcción de la paz centrado en la curación". Este enfoque requiere cambios fundamentales en el diseño de los sistemas, el funcionamiento de las organizaciones y el compromiso de los profesionales con las personas. La clave de la transformación de un sistema es que la intervención no se limita a la concienciación, sino que cambia el comportamiento, las acciones y las respuestas. Utiliza una lente de trauma para abordar la complejidad de la violencia crónica, la injusticia y la desigualdad. El enfoque reconoce que los sistemas y las estructuras que deberían apoyar la recuperación suelen estar muy dañados por la misma violencia y, por lo tanto, a menudo no pueden proporcionar el apoyo necesario para ayudar a los procesos de reconstrucción/integración. Un enfoque de consolidación de la paz centrado en la curación considera que el malestar emocional y mental es una variable crítica en los conflictos violentos y la inestabilidad. El trauma no es sólo una consecuencia de la violencia, sino también una causa de inestabilidad, desigualdad e injusticia.
La Red de Cuerdas Verdes combina muchos tipos de conocimientos diferentes. El equipo reúne a psicólogos, profesionales de la corporeidad, constructores de la paz, agentes de policía, artistas, narradores, cineastas, investigadores, profesores, padres, jóvenes, líderes comunitarios y personas con experiencias vividas. Los programas se basan en el voluntariado y se centran en proporcionar un espacio seguro para que los participantes exploren los problemas de la violencia, los efectos del trauma, la curación social y el diálogo. Entre los principales participantes se encuentran líderes juveniles, jóvenes en riesgo, grupos de mujeres, supervivientes de la violencia de género, líderes religiosos, grupos de discapacitados, como los hipoacúsicos, y la comunidad empresarial. Se hace hincapié en las narrativas que ayudan a los individuos y grupos a romper los "ciclos de violencia", desarrollando iniciativas de paz dirigidas por la comunidad. El liderazgo a todos los niveles se compromete a apoyar la ruptura de la mentalidad de víctima.
Viaje: Angi se crió en una comunidad agrícola menonita de Iowa (EE.UU.), que ella describe como una "comunidad muy aislada con una fuerte identidad" y que sólo "quería salir" e "ir lejos y ver otras cosas". En 1994 se licenció en Estudios para la Paz en la Universidad de Manchester (EE.UU.), que era un nuevo campo de estudio en aquella época, lo que la llevó a trabajar directamente con jóvenes vulnerables y refugiados. Después de ser voluntaria en AmeriCorps, trabajó en Alemania y Kosovo, y fue allí donde empezó a desarrollar las ideas que se han convertido en la Red de Cuerdas Verdes. Al darse cuenta de que las intervenciones que "deberían haber funcionado sobre el papel" tenían un impacto mínimo, desarrolló un método que utiliza el apoyo entre pares en torno a la curación social y el impacto del trauma en la toma de decisiones como base para el éxito de la construcción de la paz. Continuó sus estudios con un máster en Política Pública y Social, en el que se concentró en la resolución de conflictos y los estudios sobre la paz de la Universidad de Duquesne (1998). Angi completó su doctorado en el Centro de Estudios sobre la Paz y los Conflictos de Siem Reap (Camboya) en 2000. Angi se trasladó a Kenia en 2005 y posteriormente fundó la Red de Cuerdas Verdes. Su marido es keniano, y ella también se ha convertido en ciudadana keniana. Dice que el hecho de ser mujer no le ha impedido participar en la construcción de la paz, ni interactuar con los gobiernos y los financiadores, aunque aprecia que tiene privilegios como mujer blanca en África Oriental, y que esas oportunidades y ese respeto pueden no ofrecerse de igual manera a las mujeres locales.
Apoyo: Angi es optimista sobre el futuro, cree que está empezando a haber un cambio en los responsables políticos y en los donantes, ya que empiezan a entender que los enfoques tradicionales no están funcionando. Afirma que se ha producido un cambio en las políticas para incluir la salud mental y los elementos psicosociales en la construcción de la paz y la prevención de la violencia, aunque esto no va lo suficientemente lejos. Desea que la comunidad internacional, como la UE, Estados Unidos y las organizaciones humanitarias, se centren en la recuperación y en las soluciones a largo plazo, y que adopten formas creativas de abordar la violencia sistémica. Angi aspira a que la Red de Cuerdas Verdes se convierta en un líder regional que impulse este cambio.
